El trasplante capilar es un tratamiento que consiste en la extracción de folículos (folículos capilares de la región posterior de la cabeza y laterales) y su recolocación en la parte afectada por la calvicie, mudando apenas de lugar.
Después de la intervención, el cabello va a permanecer en las zonas receptoras durante el mismo período que ha permanecido en su lugar de origen, conservando el mismo color y las mismas características de su área original.
Esta técnica indolora consigue resultados definitivos y altamente satisfactorios, una vez que los folículos extraídos crecerán naturalmente en su nueva localización.